La adicción al sexo o la llamada dependencia sexual es un fenómeno por el cual las personas son incapaces de tomar el control sobre su comportamiento sexual. Esta adicción podría ser descrita como un proceso que lleva a que la persona se encuentre progresivamente sometida a su sexualidad, haciendo que ésta se incline más a la necesidad que al deseo.
Para Goodman, a diferencia de otras conductas sexuales de adiccion al sexo como la hipersexualidad o la ninfomanía, donde el problema es la incapacidad para estar satisfecho sexualmente, la adicción al sexo sería más una conducta como respuesta a otros problemas emocionales y psicológicos que la persona padece (autoestima, culpabilidad, depresión, ansiedad, trastornos psicosomáticos…).La adicción por tanto sería una solución a problemas de origen psicológico, a pesar de que, una vez establecida la dependencia, agravará aún más las emociones negativas que la han impulsado o generado.
SÍNTOMAS DE LA ADICCIÓN SEXUAL
Según Carnes y otros autores (Coleman, Earle y Crown, Pincu, Schwartz y Brasted), los principales síntomas asociados a la adicción sexual son:
Síntomas conductuales:
- Contactos sexuales frecuentes
- Masturbación Compulsiva
- Búsqueda de nuevos contactos sexuales para huir del aburrimiento provocado rápidamente por los anteriores
- Tentativas repetidas e infructuosas de poner fin o reducir las conductas sexuales excesivas
- Participación en actividades sexuales sin excitación psicológica
- Problemas judiciales relacionados con la conducta sexual
- Recurso frecuente a la pornografía.
Síntomas cognitivos y emocionales:
- Pensamientos obsesivos concernientes a la sexualidad y las relaciones sexuales
- Racionalizaciones para seguir con las conductas sexuales
- Culpabilidad por las actividades sexuales excesivas y problemáticas
- Soledad, aburrimiento, sentimiento de rabia como desencadenante.
- Depresión, mala opinión de sí mismo
- Vergüenza y secreto sobre las conductas sexuales
- Indiferencia respecto parejas sexuales habituales
- Falta de control en general, en la vida (no relacionada directamente con la conducta sexual)
- Deseo de huir o suprimir emociones desagradables
- Preferencia por el sexo anónimo
- Costumbre de disociar la vida privada de la sexualidad
CAUSAS DE LA ADICCIÓN AL SEXO
Se han formulado múltiples hipótesis que tratan de explicar las causas de este comportamiento adictivo, si bien en la actualidad ninguna parece ser concluyente:
- Desde una perspectiva biológica se plantea que esta adicción puede estar relacionada con una anormalidad bioquímica del cerebro. Se ha intentado relacionar el problema con niveles anormales de andrógenos sobre todo cuando existían conductas agresivas, pero ningún estudio pudo demostrar que niveles elevados de testosterona causaran este tipo de comportamiento.
- Asimismo se planteó que las endorfinas que se liberan en el cerebro tras el acto sexual y que provocan efectos calmantes y anestesiantes y en general de bienestar serian la causa. El adicto tras haber experimentado esas sensaciones ante determinadas conductas sexuales tendería a repetirlas una y otra vez buscando reproducir de nuevo lo sentido.
- Algunos estudios han apuntado a que las lesiones en la corteza prefrontal medial del cerebro dan lugar a comportamientos sexuales compulsivos.
- Desde el psicoanálisis se intentó explicar la hipersexualidad como un mecanismo de defensa, para luchar contra la castración, rechazar tendencias homosexuales, restaurar la autoestima, luchar contra la depresión, evitar sentimientos de culpabilidad y vergüenza, probando que puedes ser escogido y objeto de deseo de otro.
- La psicóloga Joyce Mac Dougall, relacionaba la sexualidad adictiva, con el intento de corregir una imagen narcisista que falla de manera que el placer sería reemplazado por la urgente necesidad de repararse y restaurar la propia imagen, haciendo las veces de una droga, de la que el sujeto se vuelve dependiente.
- Desde la Psicología la mayoría de los trabajos científicos se han centrado más en los factores de riesgo y el más estudiado ha sido los abusos sexuales padecidos en la infancia. Al parecer, los niños/as que han sufrido cualquier tipo de abuso o agresión sexual en la infancia, presentan frecuentemente trastornos sexuales en la edad adulta y es cierto que muchos adictos sexuales hablan de este tipo de experiencias

Javier Aparicio Mercader es un psicólogo con una vasta experiencia y una sólida formación en múltiples áreas de la psicología. Con una carrera que abarca más de una década, Javier ha desempeñado roles clave como psicólogo escolar, clínico, forense, orientador, psicoterapeuta y psicólogo infantil. Su dedicación y compromiso con la profesión se reflejan en su profundo conocimiento y habilidades en cada uno de estos campos.
Durante los últimos 10 años, Javier ha trabajado incansablemente para mejorar la salud mental y el bienestar de sus pacientes. Ha acumulado una amplia experiencia, permitiéndole abordar una variedad de problemáticas con una perspectiva holística y bien informada. Su enfoque integral le permite proporcionar tratamientos personalizados y efectivos, adaptándose a las necesidades específicas de cada individuo.
Desde hace 5 años, Javier dirige su propio gabinete de psicología, donde lidera un equipo de profesionales altamente capacitados. Este equipo multidisciplinario trabaja en conjunto para ofrecer servicios especializados en todas las ramas de la psicología, incluyendo la atención a trastornos emocionales, conductuales y de desarrollo en niños, adolescentes y adultos. Bajo su liderazgo, el gabinete se ha convertido en un referente en el campo de la psicología, ofreciendo un entorno seguro y de apoyo donde los pacientes pueden explorar y superar sus desafíos personales.
Javier es conocido por su enfoque estratégico y su capacidad para establecer una conexión auténtica con sus pacientes. Su pasión por la psicología y su deseo de ayudar a los demás lo impulsan a mantenerse actualizado con las últimas investigaciones y técnicas terapéuticas. Esto le permite ofrecer intervenciones basadas en la evidencia que promueven cambios significativos y duraderos en la vida de sus pacientes.