¿Se deben reprimir las emociones desagradables?
Nuestras emociones son señales que nos indican cuándo poner en marcha comportamientos coherentes a ellas. Por ejemplo la alegría nos hace repetir lo que ha provocado ese estado para estar felices, el sentimiento de seguridad nos hace seguir adelante con nuestros propósitos, con el aburrimiento buscamos algo con lo que entretenernos, si nos sentimos atacados tendemos a defendernos, el miedo nos hace protegernos, el optimismo nos lleva a confiar…
Hablamos de emociones negativas (miedo, asco, ira, tristeza) porque son los estados que nos provocan malestar, pero cumplen una función tan importante como las positivas (alegría, optimismo, placer, esperanza, seguridad, relajación). Incluso la ansiedad puede considerarse imprescindible para nuestra supervivencia (para más información leer post Manifestaciones de la ansiedad). Por ello nuestro objetivo es:
- Asumir las emociones negativas como parte de nuestro repertorio emocional con una función determinada
- Aprender a regularlas, es decir que su aparición y su intensidad sean coherentes con la situación en la que se dan
Por tanto, en consecuencia, podemos controlar nuestro comportamiento (contestar mal, ser impulsivos…) si conseguimos controlar antes las emociones.
¿Qué debo hacer al sentir un sentimiento desagradable?
La próxima vez que tengas una emoción negativa intenta identificar cuál podría ser su función. Es decir, para qué te está sirviendo sentirte así. Si consigues pararte ante tu emoción y no actuar, podrás evaluar la situación de forma distinta y en caso de que sea necesario tendrás que aprender nuevas habilidades o repertorios de conducta para mejorar tu control, es decir conseguir liberar esa emoción comportándote y sintiéndote adecuadamente.
BY AC PSICOLOGÍA
0 comentarios