Parejas controladoras y tóxicas

El control es una forma de dominio, que puede camuflarse con la excusa del cuidado o la preocupación por la pareja. La persona sana no genera situaciones de control o celos patológicos dentro de la relación. Las personas (hombre/mujer) que usan el control como forma de dominio de la pareja suelen tener un perfil agresivo-pasivo. Tienen agresividad frente a la no aceptación de sus peticiones y pasividad/afecto hacia sus deseos aceptados.

Estas personas utilizan diferentes herramientas psicológicas para controlar a su pareja de entre ellas destaca:

  • La culpabilidad: Hacer culpable a la persona de todo lo que ocurre a través de las discusiones, comentarios, problemas, reproches, censuras etc…
  • Aislamiento exclusivo: La persona trata de separar a su pareja de sus amigos, evitando quedar con los amigos de la misma. Hacer culpable a su pareja cuando salen de forma separada e independiente es común.
  • Amenazas Psicofísicas: La persona que controladora y tóxica, amenaza a su pareja atacando a sus miedos. Suele decir que terminará su relación, insulta de forma estratégica y a veces agrede físicamente. Estas situaciones se acentúan al hacer ocio separados
  • Amor condicionado: Solo se expresa afecto-amor cuando se hace lo que la persona controladora quiere, y si todo sale como él/ella desea. Un ejemplo es realizar una actividad de ocio que la persona controladora quiere. Entonces se recibirán besos y abrazos, en el caso de ver la película que tú decides habrá  discusiones.
  • Invasión de la intimidad: El controlador pide explicaciones de todo lo ocurrido cuando él/ella no está presente; conversaciones, lugares, amigos con los que se ha quedado etc… También suele querer ver el móvil, redes sociales, y cosas íntimas  (de no conseguirlo increpa a su pareja).
  • Justificación de los actos: La persona controladora justifica sus actos nefastos (insultos, infidelidades, agresiones, pasotismo). Culpabiliza a su pareja, y condicionando el acto nefasto a una actividad normal que realiza su pareja (la cual no le agrada al controlador). La frase típica es – lo he hecho por qué tú has hecho….-
  • Ghosting: Desaparecer, no contestar, pasar de la pareja o no coger las llamadas como forma de castigo una vez que se obtiene una negativa.
  • Desvalorización favorativa: Se merman los logros cometidos por la pareja y se ensalzan los propios; dando a entender que la persona controladora tiene mayor valor o es un tesoro (esto por desgracia lo hacen también algunos gurús actuales del amor), y que su pareja es una persona del montón.

En general el controlador es una persona celotipica, con una baja autoestima (escondida bajo un aspecto seguro), con baja capacidad de comunicación asertiva, poco nivel de frustración y que utiliza la agresión (a veces bien camuflada) para resolver los conflictos.

Algunas situaciones típicas que ocurren con estas personas son:

  • Pedir continuamente explicaciones.
  • Decirle a su pareja que es una puta o un cabrón cuando salen por separado (por la falsa creencia de la infidelidad ficticia).
  • Mantener discusiones continuas hasta conseguir la razón por desgaste psicológico.
  • Crear situaciones constantes en las que su pareja cumpla sus deseos para tener sensación de control.
  • Hacerle daño a su pareja y justificar sus actos con la culpabilidad; especialmente los friltreos, infidelidades o tonteos con personas ajenas a la relación.

Si te encuentras en una relación con una persona de esas características  tus capacidades psicológicas estarán mermadas. Si cumple la mayoría de los puntos o cambia o la persona te acabara absorbiendo y saturando.

 Tú hombre o mujer nunca os dejéis mermar o tratar así por nadie, a veces más vale solo, que mal y encima controlado.

By Javier Aparicio / AC Psicología Cartagena

Categorías: Sexología

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